
El cuarteto irlandés visitó el país y revolucionó desde una semana antes medios de prensa gráficos y televisivos, hubo entradas agotadas, gente de todos lados en movimiento masivo y otra tanta acampando semanas antes en el Estadio Ciudad de La Plata para verlos. En el show no faltó: demagogia, acoples, nada en español más allá de palabras como "son lo más" (= los quiero en el bolsillo) y un repertorio de 10 movimientos para la cámara que la Madre Teresa de Dublin alternó convenientemente. No todo fue malo, el escenario estaba bueno.
Tengo cosas personales con esta banda y lo sé, sé que no es el mejor grupo que pudo tocarme para un segundo post, pero no me gustan y a Bono no le creo una palabra. Y al que se esté preguntando ¿para qué fuiste entonces?: Fui a ver a MUSE que la rompió.
A ver, todo bien que uno pueda comprometerse con una causa ¿pero con todas? ¿todas? ¿To-das? No. Según el mundo rock Bono es algo así como un espíritu benéfico cuasi celestial, cuasi-perfecto, cuasi-beato, "comprometido", al que nunca agarraron en un offside. Bueno, casi.